La Cámara de Apelaciones confirmó ayer la sentencia de 40 años de prisión para Alcides Oviedo Brítez, condenado por el secuestro de Arlan Fick, además por terrorismo y asociación terrorista.
Los jueces Alberto Cabañas Gossen, Julio César Cabañas Mazacotte y Luis Alberto Ruiz Aguilar ratificaron la pena establecida de 30 años, más 10 años de medida de seguridad que recibió el líder del Ejército del Pueblo Paraguayo, considerado uno de los hombres más peligrosos del país.
El 12 de junio del año pasado Oviedo enfrentó juicio oral por estos tres hechos, en largas sesiones que se realizaron en un salón de la Agrupación Especializada, lugar de reclusión del presunto jefe del grupo armado que siembra el terror en el Norte del país.
La investigación realizada por la Fiscalía determinó que Alcides, desde su lugar de reclusión, escribió la nota con la que se pedía la liberación de miembros del EPP, que están en distintas cárceles del país; a cambio, ofreció dejar en libertad a Arlan Fick, entonces secuestrado por los guerrilleros en la zona de Paso Tuyá.
De esta manera, lo calificaron como autor intelectual del secuestro del joven menonita, que fue liberado el 25 de diciembre de 2014, a cambio de unos 500 mil dólares.
desmentida. Oviedo Brítez criticó la decisión y desmintió que haya tenido responsabilidad en ese hecho. Insistió en que el juicio en su contra fue una farsa. “El hecho cierto es que hace 15 años que estoy en prisión imposibilitado de hacer cualquier cosa y vienen a hacer acusaciones de autoría material de cualquier cosa”, había afirmado al borde del llanto al terminar su juicio.
Debido a esto, el abogado Juan Federico Hetter Garay, defensor público que representa a Oviedo, presentó un recurso de apelación especial contra la sentencia definitiva que se dio un mes antes que el hombre cumpla la condena de 15 años que estaba purgando por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi. En julio de 2019 el hombre debía haber recuperado su libertad, luego de haber cumplido esta condena impuesta por la Justicia.
Dinero de Pavão
Durante el juicio, Oviedo se refirió a Joel Cazal, uno de los fiscales acusadores, acusándolo a él de pedir dinero al narcotraficante brasileño Jarvis Chimenes Pavão. “Los agentes de la FTC, junto al fiscal Joel Cazal, le decían a Pavão que necesitaban dinero para la compra de armas y municiones”, señaló.
Fuente: Ultima Hora