La legisladora Kattya González reconoció que, si bien es necesaria una ley de esta característica, lo que llama la atención es que no se cuenta con un plan u hoja de ruta clara.
A veces esta emergencia lo único que significa para el administrador de turno son contrataciones o compras por la vía de la excepción, libre de oferentes puede ser aprovechado para embolsase algo, es un caldo de cultivo para cuestiones sospechosas. “Cuando la emergencia no está atada a un plan de corto, mediano y largo plazo, se presta a sospechas, una normativa como esta debe tener objetivos medibles y trazables», detalló.
La legisladora indicó que siempre está latente el negocio detrás de las adjudicaciones, y hay que tener mucho cuidado con los costos. Por ejemplo, dijo que, en el tema de las construcciones de las nuevas cárceles, no se tiene claro si son obras nuevas u obras internas para reacondicionar espacios. Allí aparecen las famosas adendas que al final encarecen los precios.
Fuente Megacadena